La tubería metálica tiene muchos usos. Es recurrente encontrarla en escenarios que catalizan el proceso de oxidación como la intemperie, humedad, salinidad, exposición al sol, entre otros factores.
Cada tubería tiene su propia aleación de minerales y metales. Esto influye tanto en la velocidad, como la manera en que se oxidan las piezas. Pintar la tubería es muchas veces costoso, además de acarrear problemas adicionales, pero entonces ¿Cómo proteger estas piezas de la oxidación? Muy sencillo, con nuestro S-233 Protector de Tarea pesada, puedes rociar la tubería y prevenir que esta se pueda oxidar. Esto además puede removerse con facilidad sí posteriormente se desea o se puede dejar hasta cuando se desee. Así podrás prolongar la vida de la tubería almacenada o lista para utilizar en obras, bodegas, plantas, campamentos, etc.
Pregunta por este y otros productos similares que mejoraran tú operación.